No sabemos cómo mismo calificar la salida al julepe de Emilio Palacio hacia los "Mayamis", lugar favorito de los banqueros "corructos" y ahora de los periodistas enjuiciados.
Algunos dirán que es cobarde y que ha metido el rabo entre las piernas y ha salido soplado, pero...métase en sus pantalones y verán que no es lo mismo mirar los toros desde lejitos. ¿Imagínense que un juez más rápido que "la voladora" lo sentencia a pagar una saquillada de plata y encima le chanten un curso obligatorio para canario de tres a cinco años tras los barrotes y bajo sombra? ¡Bah! ni cojudo que fuera para andarse quedando dizque de valiente y aguantar "mesejante" barbaridad sólo porque le dijo al lenguaraz de Carondelet que la había embarrado en el 30S.
Claro que hay que ponerse de los dos lados y aceptar que a Palacio se le fué la lengua y la mano sin tener pruebas que "amuestren" que era verdad lo que decía, cosiaca que aprovechó el hablador sabatino para montarle juicio por "daños y prejuicios" y, teniendo la justicia comprada hasta las banderas, le pidió junto a los "yuplises" de El Universo la bicoca de 80 milllones de los verdes que no son pelo de rana calva.
Y para hacerse el buenito y bondadoso, y encima hacerle "el ole" o "jugarle Barcelona" a los que le empezaron a lanzar dardos, dijo muy suelto de huesos que ese "platanal" iba completo para el Yasuní ITT, siendo que la salvación de esas tierras de la explotación petrolera es un sueño de perros, úsea que no veremos nunca.
¿Cómo terminará el entuerto?, no sabemos, pero sí habrá bastante tela para cortar todavía en este lío entre Palacio, la cúpula Universal y el presidente "telescopio" porque no le quita los ojos de encima a "El Universo". Chau, vidrios.
lunes, 5 de septiembre de 2011
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